martes, 20 de abril de 2010

¿Me estoy convirtiendo en fetichista? Por favor, no se asusten...


Sé perfectamente los múltiples significados que engloba esta palabra, he leído las definiciones de cada desviación sexual en distintos materiales, desde libros escolares hasta páginas de Internet; y pese a tener mucho conocimiento sobre el tema, nunca imaginé que podría caer en alguno de ellos.


Quizás mi memoria esté fallado o probablemente se niegue a encontrar el origen de todo esto; y si bien no lo considero grave (aún) creo que tarde o temprano me comenzará a afectar tal y como lo han venido haciendo mis gustos en general. ¿De qué demonios está hablando? se estarán preguntando algunos; pues bien, empezaré diciendo que mi "fetichismo" no es tan específico y el mismo podría tener o presentar varias ramas, lo cierto es que todavía no he hallado su significado pues sólo siento una especie de placer (¿o excitación?) hacia algunas prendas de vestir femeninas, hasta incluso por los zapatos sin tacones.


Nunca me consideré del todo normal, y creo que esta extraña conducta no es más que otra obsesión mía en cuanto al tema. Quise hablar de esto porque mientras estaba en el cine viendo "Valentine's Day" el sábado, no pude dejar de excitarme por Emma Roberts (una actriz que conozco hace mucho y de la que siempre me consideré un admirador); me fascinó la manera en la que estuvo vestida, tanto, que a sabiendas de ello, busqué entre mi placard el mismo pantalón (jean) y una remera color púrpura bien parecida a la (¿blusa?) que usó Emma en la película.


Al entrar a la sala me senté hacia el frente y durante toda la proyección pude apreciar a Emma con una vestimenta igual a la mía (incluso con mi mismo color de cabello y de piel) actuando en un personaje que prácticamente no logró capturar ni una fracción de su tremendo potencial; sin embargo, fue tan agradable verla que nada de eso terminó afectándome, al contrario, creo que esa misma falta de seriedad me permitió disfrutar aún más de la película (y de Grace).


Ahora, para lo que vine; me fascinaron sus zapatos, incluso me imaginaba usándolos y caminando como ella... en ese momento, supe inmediatamente que algo andába mal conmigo. Generalmente adoro ver a una actriz joven y atractiva como Emma, pero pocas veces he llegado hasta el punto en que su vestimenta me cause una extraña (pero placentera) sensación.


En fin, no quiero alagar esto con párrafos y párrafos de hipérbole o directamente, con absurdas conclusiones; creo que estoy convirtiéndome en una especie de fetichista pasivo (y discreto), que guarda en su interior una especie de excitación hacia un denominado estilo de vestir femenino y de los colores mismos. Probablemente no se dé en todos los casos ni con todas las mujeres ni con todas las actrices. Según recuerdo he pasado por casos similares con otras (en este momento recuerdo a Camilla Belle; y que me disculpe una devota admiradora suya si le parece demasiado extraña mi conducta).


En pocas palabras, el sábado pasado fue sin dudas excepcional, a parte de ver la denominada película y de haber disfrutado no sólo de Emma Roberts (y de su vestimenta -zapatos incluidos-) o del resto de las atractivas actrices... también descubrí un nuevo placer del que podré sacar provecho, y creo que en este momento ya no hacen falta más aclaraciones. Por cierto, olvidé mencionar el saco verde de Emma... sí, tal vez eso me faltó para llegar al orgasmo.

P.D.: Fetichismo Actualmente Indefinido.

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