La actriz de "Alicia en el País de las Maravillas" Australiana, estudió para ser bailarina, pero eligió la actuación. Tiene 20 años y trabaja en la versión de Tim Burton.
La imagen de la chica que entra a la sala del Dorchester Hotel, donde la espera una decena de periodistas de todo el mundo, poco tiene que ver con la Alicia que interpreta en la reciente versión de Tim Burton del cuento de Lewis Carroll.
Fuera de la ficción, Mia Wasikowska para nada transmite la sensación de confusión que parece atormentar a su personaje durante casi todo el film. A pesar de su aspecto casi adolescente, que acentúa su corte de pelo, y de su corta trayectoria en el medio, la actriz responde con la madurez de quien conoce el terreno en el que se mueve.
"Durante el rodaje, quien realmente me impresionó fue Mia. Con muy poca experiencia en el mundo del cine, hizo un trabajo fantástico", había dicho minutos antes Burton. Y aunque parece que Mia ya no se sorprende cuando le comentan los elogios del director, enseguida le dedica un párrafo aparte: "Tim me dio la oportunidad de trabajar con gran libertad, sin presiones. Y eso fue esencial a la hora de darle forma a mi Alicia", dice.
Esa libertad de la que habla está asociada con el clima que también contribuyeron a crear Johnny Depp, Helena Bonham Carter y el resto del elenco. "En todo momento me hicieron sentir parte del grupo de trabajo, lo que hizo que no me sintiera intimidada a la hora de compartir escenas con ellos", cuenta Wasikowska, quien apenas cuatro años atrás decidió dejar de lado sus aspiraciones de bailarina y concentrarse en su carrera de actriz.
"La danza se estaba convirtiendo en un sufrimiento. Los últimos tiempos pasaba unas 35 horas por semana en el estudio, y la obsesión por la perfección me estaba haciendo mal. Pero no era una decisión fácil, porque donde vivía no había agentes artísticos, y las perspectivas eran acotadas", explica.
El primer paso fue, entonces, recorrer el trayecto que une su Canberra natal hasta Sidney, en busca de un horizonte más amplio. Tras un paso fugaz por la telenovela All Saints, en 2004, saltó a producciones cienematográficas locales, con alguna nominación para un premio que quedó a mitad de camino.
Mia no esperó una nueva oportunidad. Con el apoyo absoluto de su madre, una fotógrafa polaca, y su padre, un pintor australiano, dio el segundo gran paso. Esta vez, con proa a los Estados Unidos, sin escalas. Allí, 2008 se convirtió en su año de despegue. Su Sofía en la tira de HBO In Treatment se ganó los favores de la crítica, y orientó la mirada de productores y directores en su dirección.
Lo que siguió fue un tape en velocidad acelerada. Una audición, otra más, varias semanas de pruebas, y el veredicto final de Tim Burton: "El papel de Alicia es tuyo". "A partir de ese momento me interné en el carácter del personaje y traté de profundizar en su parte más humana", cuenta Wasikowska, que no pierde su sonrisa ni por un instante.
Para la actriz, "había algo muy interesante en la idea de ser transportada de tu mundo adolescente a otro. Es una edad a la que sos lo suficientemente adulta para asimilar ese viaje, y entender lo que sucede. Pero al mismo tiempo mantenés una distancia con el modo del ver las cosas que suelen tener los adultos."
Además, explica, "muchas mujeres aún hoy tratan de convertirse en aquello que los demás esperan de ellas, algo que también sucede con la Alicia de la película, y contra lo que ella se rebela." "En ese sentido -concluye-, me parecía atractivo asumir ese rol como actriz."
Un desafío que presentaba la dificultad adicional de incorporar los códigos del formato 3D. "La experiencia de crear las escenas sin un interlocutor, sin un decorado que enmarque el lugar, jugando a dialogar con seres animados que serán puestos después en la pantalla es tan difícil como fascinante", admite, y agrega: "En ese punto, el manejo del cuerpo que me dio la danza es un aporte que me ayudó muchísimo",
La dinámica impuesta por la aplicación de las nuevas tecnologías hizo que, a pesar del reciente estreno del filme, el rodaje ya sea parte de la memoria. En la actualidad de Mia Wasikowska, su Alicia comparte cartel con el personaje que juega en The Kids Are All Right, en el que comparte con Annette Benning y Julianne Moore el elenco dirigido por Lisa Cholodenko.
En tanto de cara al futuro su nombre aparece asociado al nuevo proyecto del director norteamericano Gus Van Sant, y al de Cary Fukunaga, para su próxima producción Jane Eyre. Producciones que coinciden con la búsqueda artística de Mia, sin dejarse encandilar. "Alicia, por el alto perfil del personaje, me dio un lugar de mucha exposición. Pero prefiero mantener los pies sobre la tierra, y seguir creciendo de a poco", cierra sin vanidad.
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