Brittany Snow: Donna Keppel (Prom Night)

Terror. Thriller. Intriga. Remake / SINOPSIS: La mágica noche con que sueñan todas las estudiantes de instituto se convierte en una pesadilla para Donna Keppel (Brittany Snow), cuando el obseso psicópata que mató a toda su familia se escapa de la cárcel y viene a buscarla. Lo que debería haber sido la noche de su vida se convierte en un mortal juego de gato y ratón, cuando Donna y sus amigos son atacados por un sanguinario demente que no dejará que nada se interponga entre él y su víctima elegida.

Crítica de la película y la actriz:

Me arriesgaré a escribir esta crítica sin hacer comparaciones con respecto a la película original, dirigida por Paul Lynch y protagonizada por Jamie Lee Curtis. Este remake (según he leído), es básicamente lo mismo que su atencesora, solo que con el impacto reducido y minimizado ante la frenética edición, los infaltables juegos de cámara y su joven reparto. "Prom Night" es uno de los íconos del Slasher; cuando se estrenó en 1980 obtuvo bastante éxito, el cuál perduró por varios años (más bien décadas), hasta que un consabido director llamado Nelson McCormick se atrevió a dirigirla, escogiendo a Brittany Snow como protagonista. Ésta actriz ha tenido papeles en cintas familiares como "The Pacifier", "John Tucker Must Die", "Hairspray", entre otros; siempre me ha gustado la simpatía que aporta a cada uno de sus personajes, y si bien no es una actriz de prestigio (es decir, no de las que merecen un Oscar), ha tenido buena trascendecia durante su carrera.

Entre todos los papeles que interpretó, fue "Prom Night" el que más me gustó; quizás porque nunca pierdo de vista a las actrices que destacan su personaje en las peliculas de terror o porque simplemente admiro la fuerza de su actuación (hasta en un film de baja calidad). No me refiero a que este remake carezca de presupuesto, sino todo lo contrario, ésta contiene más del que debería; en muchas escenas se respira un aire de falsedad; existió un ambiente artificial... no hubo un ápice de realismo o un atisbo de credibilidad, cada escena está compuesta por estruendosa música, irrisorio suspenso y blandos asesinatos perpetrados por un psicópata obsesivo que no aspira temor alguno, sino lo opuesto. Aunque pese a las suaves escenas de muertes (todas basadas en puñaladas o degollamientos) y al predecible curso de la trama, "Prom Night" ofrece moderado entretenimiento y una protagonista muy bella, que carga en sus hombros todo el peso de la película. No me gustó el final (aunque por lo menos fue fiel al original) sin embargo, lo encontré demasiado fácil, es decir, no nos dejó con la intriga o la tensión en velo, sino que el director (o mejor dicho, los directores) prefirieron cerrar la historia y no dejarla abierta para una innecesaria secuela.

Supongo que por un lado eso fue inteligente, ya que lo poco de bueno que tuvo la original (y su remake) no merece ser arruinado por la repetición de los mismos temas. "Prom Night" es una película hecha para un público joven, no creo que un espectador con más de 20 años la logre disfrutar; la simpleza de su libreto y lo predecible de su relato, solo serán disfrutados por espectadores a quienes no les guste pensar ni razonar mientras ven una película. El Slasher es totalmente lo opuesto al Gore; hay escasa violencia, poca sangre, mismo argumento y el serial-killer siempre tiene motivos absurdos para matar (o practicamente no necesita ninguno, como Michael Myers de la saga "Halloween"). Pero aún así se trata de un subgénero divertido y que complace a su moderada gama de aficionados. No se puede profundizar demasiado en la historia de "Prom Night" ya que no hay mucho por decir... basta con mencionar que como pasatiempo de 90 minutos funciona a la perfección, pero como película memorable es tan olvidable y desechable como cualquier film que encontremos en el videoclub.

El personaje de Donna se lleva todos los aplausos, me gustó como expresaba el temor y la angustia en su rostro, me encantó la manera como huía del asesino e intentaba enfrentarse a el... disfruté plenamente de los pausados diálogos con su novio, sus sensuales movimientos en la pista de baile y las sorpresivas persecuciones dentro del prestigioso hotel. Aunque quizás el máximo provecho que obtuve al verla fue en los primeros minutos, cuando Donna llegó del cine y al entrar a su casa se encontró con su familia muerta, entonces se escondió bajo la cama y vió como el sádico psicópata mata a su madre, evento que le generó un profundo trauma psicológico que trató de superar con su terapeuta. La noche de su graduación se celebró en un elegante hotel, donde el psicópata le siguió el rastro y por supuesto, en el camino se le cruzaron abundantes obstáculos (los amigos de Donna y algunos personales del hotel), a quienes no dudó en matar; el detective de policía que estaba a cargo del caso debía vigilar a Donna para evitar que el psicópata vuelva a hacer de las suyas, y allí comienza lo interesante... es en ese momento cuando la tensión logra instalarse en el público; bueno, al menos que el espectador se encuentre en plena pubertad. (Disculpen, solté demasiados Spoilers)

Sin ánimos de revelar más partes del argumento simplemente diré que "Prom Night" se safa de caer en la mediocridad únicamente gracias a su actriz protagónica y a un par de escenas que merecen la pena, quizás no por su originalidad (que es practicamente nula), sino porque aún así, pese a su falta de innovación, logró captar nuestra atención y mantenernos expectantes ante lo próximo que ocurrirá. Pese a sus fallas dentro del guión, lo predecible de su relato y la blanda narrativa, "Prom Night" es un remake que complace a quienes hayan disfrutado del film original; y a pesar de que Brittany Snow jamás podrá igual el talento de Jamie Lee Curtis, se agradece su buena presencia y la sólida compenetración con su personaje... creo que otra actriz no lo hubiera podido hacer mejor. En comparación a otros remakes recientes, creo que "Prom Night" no está tan mal, después de todo, si recordamos el de "Black Christmas" nos daremos cuenta de la gran diferencia (atroz remake que por cierto, solo he visto por la presencia de Mary Elizabeth Winstead y Lacey Chabert). En fin, hace mucho que no veía tanto potencial en un papel relativamente vácuo y trillado; creo que desde "P2" (con Rachel Nichols) no me emocionaba tanto con una actriz. Otra prueba de que Brittany Snow es fantástica... ¿Hace falta más motivación para ver esta película?